Aportar más desde la Uneac
Que la cultura esté dotada de poderosas herramientas para construir la unidad y defender nuestra idiosincrasia e historia, acompañada de ética y compromiso en la formación de valores en el ser humano, resultó expresión común entre los participantes en un nuevo encuentro sostenido por miembros de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba con el presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez y en el que participó el miembro del Secretariado y jefe del Departamento Ideológico, Rogelio Polanco Fuentes.
Durante más de una hora en el Palacio de la Revolución, se habló del estado actual de cumplimiento de los acuerdos y planteamientos emanados del Noveno Congreso de la UNEAC vinculados con la Comisión Permanente de Educación, Cultura y Sociedad.
En informe presentado por el presidente de la UNEAC, Luis Morlotte Rivas se expusieron los vínculos de la cultura, educación y comunidad, así como el papel del arte en la sociedad, y la escuela como centro cultural más importante del barrio.
En el período hemos discutido temas vinculados con la contribución del arte a la sociedad, afirmó Morlotte Rivas, durante la presentación de su informe que dio paso al debate. Mencionó también el tema de la formación de los egresados de la enseñanza artística y su roll en la escuela para aportar la sensibilidad y la cultura en las personas para apreciar la música u otra manifestación del arte.
Con la emoción de quien ha dedicado su vida a la doble misión de ofrecer arte y enseñar, el director de la Compañía Infantil La Colmenita, Carlos Alberto Cremata, narró experiencias vividas durante presentaciones en más de cuarenta instituciones del país, donde ha profundizado en la obra de José Martí y, a través de su pensamiento, contribuido a crear valores.
“No solo es que Martí te enseñe a ser más culto, sino que Martí sirve para vivir mejor”, así expresó al narrar sus experiencias durante estos últimos tiempos, “siento que voy regando almas buenas”.
Entretanto, la necesidad de rescatar las cantorías infantiles, fue reclamo de Digna Guerra, una experiencia que consideró única “porque el canto dignifica y enaltece a los niños, y eso igualmente les aporta en su formación”.
Desde el municipio habanero de La Lisa, llegó la experiencia expresada por Niuris García, en la que una escuela se transforma en centro cultural en beneficio de niños y adolescentes de la comunidad. “La idea es que amen la música y conozcan la historia de Cuba, cuando ésta se conoce provoca que amemos nuestras raíces”, confesó emocionada.
“Durante estos trece años de trascurrida la experiencia, hemos dado más de cuarenta conciertos, muchos de ellos en horario de la noche, con toda la familia ahí, es importante lo que se ha logrado, porque considero es un reconocimiento al aporte de la comunidad”.
Y como los tiempos son complejos, para los escritores y artistas cubanos se imponen nuevos retos. Uno de ellos se centra en la educación audiovisual en niños, adolescentes y jóvenes, algo vital e impostergable para saber discernir entre contenidos enaltecedores y otros de extrema banalidad que circulan en productos comunicativos donde predominan la imagen y el sonido.
Para Iván Barreto es un asunto de todos y no solo un problema a enfrentar por los instructores de arte, este empeño requiere de sistematicidad, “nos falta integración para crearle un universo al niño cubano para que cuando llegue a joven o adulto disponga de herramientas para que realmente sea un consumidor crítico de todo el mundo audiovisual y no solo del cine, también de las redes sociales. Y esa educación nosotros tenemos que lograrla desde la escuela”.
Casi en el epílogo del encuentro de los artistas y escritores cubanos con nuestro presidente, Miguel Barnet introdujo el tema de la política vinculada al arte, en un contexto donde nuestros enemigos no cesan de atacar a nuestra Revolución “el concepto de política es de los revolucionarios”, acotaba.
Al agradecer el nuevo intercambio, el Jefe de Estado cubano calificó las experiencias presentadas en el ámbito de la educación cultural y la formación de valores, como muy aportadoras: “Aquí estamos tratando de promover cómo las personas se hacen de una forma y perspectiva para llevar desde la cultura el pensamiento martiano, la historia, pero de una manera que encante, creativa y eso complemente entonces lo que se hace en la escuela, el papel de la familia y en otros de espacios que existen a nivel de la sociedad”.
El presidente se preguntó qué nos falta para continuar avanzando y socializar los mejores ejemplos. Advirtió que “nos falta integrar, articular más, socializar, oír más a las personas que quieren proponer proyectos, ayudarlos, asesorarlos y abrirles puertas sobre la base de las experiencias que tenemos”.
El encuentro de representantes de la UNEAC con nuestro presidente, que evaluó el estado de cumplimiento de los acuerdos y planteamientos del pasado Noveno Congreso de la organización, ratificó que la escuela cubana requiere del aporte de todos los factores de la sociedad para continuar sumando al proyecto educativo y contribuir a la formación integral de las jóvenes generaciones.
Fuente: Cubadebate