Algún día no tendremos que cantarla más
Por: Guille Vilar.
Crearemos el caos y la confusión. De una manera imperceptible, pero activa y constante, propiciaremos el soborno, la corrupción, la falta de principios. La honradez y la honestidad serán ridiculizadas como innecesarias y convertidas en un vestigio del pasado. El descaro, la insolencia, el engaño y la mentira, el alcoholismo y la drogadicción, el miedo irracional entre semejantes, la traición, la enemistad entre los pueblos y, ante todo el odio al socialismo, todo esto lo vamos a cultivar hábilmente hasta que reviente como el capullo de una flor. Solo unos pocos acertarán a sospechar e incluso comprender lo que realmente sucede. Pero a esa gente la situaremos en una posición de indefensión, ridiculizándolos, encontrando maneras de calumniarlos, desacreditarlos y señalarlos como desechos de la sociedad.
Con estas palabras que parecen tomadas del guión de una película de terror, pues en realidad reflejan el sentir de Allen Dulles —quien fuera el director de la CIA de 1953 a 1961, y la hemos escogido como la mejor introducción para conmemorar el aniversario 50 de la canción “Imagine”, de John Lennon y Yoko Ono. Justamente esta reflexión de Dulles representa la otra cara de la moneda en lo relativo a la alentadora atmósfera de optimismo y de confianza en la humanidad, que Lennon alcanza a plasmar en la entrega de amor al prójimo en “Imagine”.
De alguna manera, John y Yoko sintieron en carne propia el hálito de odio desatado por el FBI en contra de ellos, debido a su decidida implicación en toda causa justa enarbolada por la juventud norteamericana en los años 70 del pasado siglo. De entre las diferentes canciones de explícito contenido social que John y Yoko grabaron como “Angela”, “Woman is the nigger of the world”, “Attica State” o “New York City”, la que verdaderamente duele en las altas esferas del gobierno norteamericano en aquellos años fue “Imagine”, himno pacifista que a propósito era coreado por miles de personas en las habituales manifestaciones en contra de la guerra de Viet Nam.
Aunque aparentemente con el escándalo del Watergate, hecho que motiva la renuncia del presidente Richard Nixon, se pone fin al acoso del FBI sobre John y Yoko para que abandonaran los Estados Unidos, en realidad le pasaron la cuenta al ser John asesinado en diciembre de 1980 a manos de un supuesto demente. Quizás lo que ofenda de “Imagine” a la extrema derecha, es que acude a la buena voluntad para hacer realidad el sueño de ese mundo mejor al que tenemos derecho.
Al igual que la predica de líderes casualmente asesinados, como el hindú Gandhi y el norteamericano Martin Luther King, el espíritu de la canción “Imagine” alude al convencimiento de que, desde el nivel personal de cada cual, podemos alcanzar entre todos nosotros la solidaridad necesaria para transformar la precaria situación social que afecta a millones de personas en el planeta.
Es la propia Yoko Ono quien, en una entrevista expone del modo más bello posible esa necesidad de unirnos:
Cada grano de arena cuenta. Me gustaría explicarte una cosa muy sencilla que podemos hacer. Cada día haz algo que te alegre el corazón. Y si tu corazón está tan deprimido que no lo puedes conseguir, entonces haz algo que alegre el corazón de los demás… puede ser algo tan simple como hacer una llamada telefónica. Si lo haces durante tres meses, observarás un cambio increíble en tu vida. Tu vida cambia completamente. Y si tu vida cambia, entonces, de igual manera, también podemos cambiar el mundo.
Sin embargo, Yoko es capaz de ofrecer una perspectiva menos poética en cuanto al panorama sombrío que debemos confrontar:
Bueno, la situación en el mundo es bastante tensa, como todos sabemos… Están ocurriendo muchas cosas que nos llevan a creer que puede acabar todo muy mal. De modo que tenemos que darnos prisa. Por eso, tenemos que saber que estamos juntos en esto. Sabes, lo más interesante es que, aun cuando estamos discutiendo, nuestros corazones laten al unísono. Debemos saber que somos parte del todo, que todos estamos juntos. Y que todo lo que hacemos afecta a los otros1.
Entonces, que este breve elogio a “Imagine” nos permita coincidir con el optimismo de Yoko Ono en que «algún día no tendremos que cantarla más».
NOTA:
1 Entrevista realizada a Yoko Ono en el 2010, tomada de www.amnistiacatalunya.org
Fuente: Cubarte